La grandeza se mide por la sencillez. Como la que demostró la pasada semana Alejandro Talavante que acudió, por sorpresa, al ruedo de la plaza de toros de Badajoz para seguir en directo una tarde de entrenamiento de los alumnos de la Escuela provincial de Tauromaquia. Allí, el diestro pacense, conoció de primera mano cómo es la evolución de los chicos que siguen sus pasos en la formación taurina que no hace tantos años él tomase en ese mismo escenario de la mano de Luis Reina, maestro que días atrás con uno de sus novillos había recibido un sincero homenaje.
