No hay mejor forma para combatir el frío que el calor del toreo y la camaradería de la gente. De ahí que la Peña Taurina Ambel Posada hoy haya triunfado combatiendo al frío de la mejor forma posible: a través de la fiesta con que conmemoran cada año su existencia.
Antonio Girol.-
Con la llegada del frío, que aparte de heladas y lluvia, trae nubes de melancolía torera, es habitual que los aficionados busquen el calor de la reunión en torno a la fiesta. Esto mismo es lo que han llevado a efecto los miembros de la Peña Taurina Ambel Posada, quienes en la mañana de hoy se han juntado para hacer pública expresión de su afición y la devoción a su torero, que pronto será a sus dos toreros, ya que el menor de los Posada viene arreando fuerte.
Para su fiesta anual eligieron el mejor marco posible: la plaza de toros de Badajoz. Donde, primeramente, pudieron solazarse con una faena preñada de sentimiento y estética de Santiago, que envolvió a un buen novillo de ‘El Marqués de Villalba de los Llanos’, en el suave celofán de su muleta.
Instrumentó Tati muletazos que rebosaban torería y gusto. Que nacían enhebrados en la aguja de un legado familiar que tiene en Juanlu el menor de los hermanos, que ha añadido al dinástico apellido el patronímico de su madre, como seña de identidad, para hacer de su tauromaquia una ‘Maravilla’.
Como no podía ser de otra forma, los asistentes, en el almuerzo, revivieron las faenas de los dos hermanos, felicitaron a Miguel Moreno, por la excelente calidad de sus dos ejemplares y, brindaron porque la próxima temporada venga cargada de éxitos para Ambel Posada y Posada de Maravillas, dos ramas de un mismo tronco: el del Toreo.
LA FIESTA DE LA PEÑA EN IMÁGENES. FOTOS: GALLARDO. |
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