Próximo a su debut con los del castoreño, Posada de Maravillas charla para los lectores de BADAJOZ TAURINA en los momentos previos al tentadero que efectuó en ‘Los Espartales’. En la siguiente entrevista nos cuenta cómo se encuentra y cómo está viviendo estos días previos. (GALERÍA GRÁFICA EN EL INTERIOR)
Antonio Girol.-
Por sus venas corre sangre de la dinastía que más años lleva en activo en el mundo del toro, la de los Posada. Por eso cuando el próximo día tres se líe el capote de paseo en la novillada matinal de la feria de Olivenza tendrá el honor y la responsabilidad extra de saberse parte de la historia de una saga de toreros que naciese en la figura de aquel caballero que anunciaba su nombre en los carteles como Francisco de Posada y que en sus hijos Faustino, Curro y Antonio dejó la mejor herencia posible. Luego vendrían Juan, el eslabón que unió el toreo de la marisma al de la dehesa y del que surgieron primero su hijo Antonio y luego su nieto Santiago. Ahora le toca al menor inscribir su nombre en el árbol taurino genealógico.
Y para ello se está preparando concienzudamente en estas jornadas previas a su inminente debut con picadores porque la cita de ese domingo de marzo no será una fecha cualquiera, será la del día en que tras plantar sus raíces un nuevo vástago de los Posada comience a dar frutos.
Nos acercamos hasta la finca ‘Los Espartales’ propiedad de José Luis Iniesta para testar el momento de forma de un chaval que enarbolará por las plazas no solo el apellido materno sino también el nombre de aquella que le dio la vida y la sangre dinástica que corre por sus venas. Es hora de hablar con Juan Luis Posada, el hijo de Maravillas.
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– Juan Luis ¿cómo estás viviendo estos días previos al ansiado debut con picadores del próximo 3 de marzo en Olivenza?
– Con muchos nervios. Pero afortunadamente se sobrellevan con las ganas y la ilusión que tengo de que llegue ya el día. – ¿En qué está consistiendo tu preparación? |
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– Ando como se suele decir a caballo entre Badajoz y Madrid. Allí llevo a cabo todo el entrenamiento técnico y físico con una programación de tres horas diarias por la mañana y otras tantas por la tarde. Y aquí, la preparación en el campo.
– Eso suena a dedicación exclusiva, ¿no?
– Efectivamente así es. Estoy centrado al cien por cien en mi profesión y en el toro. No hay otra manera de afrontar los retos como no sea de esa manera.
– El año 2011 lo cerraste con un número de festejos toreados por debajo de la decena, ¿esperabas más de tu última temporada sin caballos?
– Siempre pienso que uno debe ir a más. Es verdad que el año pasado actué en pocos festejos. Pero en cambio me proporcionaron una enorme satisfacción en todos los ámbitos. Y eso es en ocasiones más importante que el número, aunque me hubiese gustado vestirme más veces de luces. ¿A quién no le apetece torear mucho?
– De las que te pusiste la taleguilla, ¿con cuál te quedas?
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«…me quedo con Sevilla porque fue una gran prueba…»
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– Te va a parecer extraño pero me quedo con Sevilla porque fue una gran prueba en el ámbito personal y profesional. Y como todas las grandes pruebas el resultado es que te hacen evolucionar. |
– El pasado año en Don Benito se pudo ver prácticamente el mismo cartel que se anuncia para Olivenza. A excepción de Miguel Ángel Silva repetís los toreros y el ganadero. ¿Qué recuerdas de aquella tarde?
– La novillada tuvo unas condiciones extraordinarias. Y eso se tradujo en que tanto el ganadero como los toreros salimos felices de la plaza. Basándonos en ese precedente la cosa promete de cara al 3 de marzo (risas)
– Hace unos días estuviste tentando en El Freixo, ¿viste los novillos en el campo o prefieres encontrártelos directamente en la plaza sin echarles un ojo antes? Por cierto, ¿qué tal se dio el tentadero?
– Tengo la costumbre de no ver nunca los novillos antes de torear. No me gusta ver los toros ni el campo ni en el sorteo. Reservo ese encuentro para la plaza. En cuanto al tentadero me aportó muchísimo de cara a mi preparación porque tuve la ocasión de torear dos vacas que se dejaron mucho y después matar a un toro con una nobleza y una clase fuera de lo normal.
– ¿Te hace especial ilusión compartir el debut con dos compañeros de Escuela?
– Mucha. Los conozco desde mis inicios y pienso que es muy bonito poder compartir un día tan especial con ellos en el cartel. Hay que agradecer mucho tanto a la empresa como a la escuela el permitir que podamos debutar en una feria en la que van a torear casi todas las figuras del toreo. Aparte creo que es un cartel muy atractivo no sólo para el aficionado sino también para el que no es tan aficionado.
– Al hilo del tema de la Escuela, ¿qué recuerdo guardas de tu paso por sus aulas taurinas?
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– No fue mi primer contacto con el toro pues soy el último de una dinastía que es, si mi memoria no me falla, la más antigua de toreros en activo. Sí que es verdad que en la Escuela Taurina de Badajoz he adquirido unos valores y un aprendizaje tanto a nivel humano como profesional que agradezco mucho. Por eso no tengo más que palabras de gratitud para Nandi, ‘Antoñete’ y Luis Reina por la labor que hacen con tantos chavales y especialmente por el esfuerzo que supone dar el debut con caballos a tres alumnos. Eso dice mucho de la calidad y el compromiso del Patronato de Tauromaquia hacia la formación taurina. – Llevas todo el invierno entrenando con la guía de tu hermano Santiago y tu tío Antonio. Ahora que no nos escucha nadie, ¿qué tal son como Maestros? |
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– Tremendamente exigentes. Pero eso me sirve para entender gracias a ellos que hay que vivir por y para el toro. Los triunfos no llegan sin una entrega absoluta. Además en Madrid cuento con Curro Álvarez que se encarga de la preparación técnica y física. Y no puedo dejar de referirme a Luis Álvarez por quien siento un gran respeto y admiración. Además de que tengo mucho que agradecerle porque me trata como si fuese un hijo.
– Con todo ese grupo de profesionales que estás centrado en ti se puede decir que en Olivenza los aficionados se van a encontrar a un torero muy preparado.
– Así es. Esa es la idea. Hay que llegar al día tres de marzo preparado al cien por cien para que no haya ninguna duda y poder triunfar a poco que los novillos se dejen pegar veinte pases por debajo de la pala del pitón. Y si no, también…
– Hablas de pegar veinte pases por debajo de la pala del pitón y a la mente se me vienen faenas tuyas de mucho peso como las de Zafra o Badajoz. Crees que por tu corte de toreo el mayor volumen del utrero puede adaptarse mejor a esa concepción artística de tu tauromaquia?
– Por supuesto. Pienso que cuando se va a poder disfrutar de mi toreo será de aquí en adelante.
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– Y después del debut, ¿cómo se presenta el panorama? – Todo depende de Olivenza. Esa es la carta que me juego. – ¿A la hora de dar el salto a las novilladas con caballos no da vértigo ver que éstas brillan por su ausencia en prácticamente todas las Ferias y Plazas? – No te imaginas cuanto. Pero no queda otra si quieres evolucionar y ser matador de toros. Faltaran novilladas pero lo que no puede faltar es las ganas de poner todo lo que haya que poner para que los aficionados demanden mi presencia en los carteles que se den. |
– Volviendo a esa mañana del domingo 3 de marzo, ¿en qué pensarás cuando se abra la puerta de cuadrillas y eches a andar para cruzar la plaza y saludar al presidente del festejo?
– No sé que se me pasará por la cabeza. Seguramente lo que querré será saborear ese momento, aunque pase de forma tan fugaz. Y una vez con el novillo delante pues a disfrutarlo y sentir el toreo como yo lo siento que para mí es lo más bonito que hay en la vida.
– Por cierto, ¿sabes ya que traje te pondrás?
– Aún no lo sé. La decisión la tomaré esa misma mañana
– Gracias Juanlu por permitirnos unos minutos de tu tiempo para que los lectores de BADAJOZ TAURINA puedan conocer mejor cómo es tu preparación y tus sensaciones de cara al debut.
– De nada. El agradecido soy yo por haber tenido la deferencia de hacerme esta entrevista y acompañarme en el tentadero.
– ¡Suerte torero!
– Gracias
EN ‘LOS ESPARTALES’ CON LA VISTA FIJA EN EL DEBUT. FOTOS: J.Mª. BALLESTER |
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En la siguiente secuencia nuestro compañero Ballester recoge cómo el novillero aprovechando el tranqueo de la erala murubeña la cita en largo y la engancha en su muleta. |
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Otros momentos de la actuación en el tentadero en los que se aprecia el gusto del menor de los Posada por el toreo de mano baja, cintura encajada y barbilla enterrada… |
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¿Qué sería de un tentadero sin ver el comportamiento de los animales en el caballo? Aquí obsrvamos cómo se desplaza la vaca a la llamada del picador Guillermo Marín. La magia de la bravura… |
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